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bem achámos nos mesmos Originaes de Faria, entre outras obras suas, huma Ecloga, (naõ nos consta que se imprimisse separadamente, nem tam pouco conservamos memoria de a ver nas Obras Poeticas do mesmo Faria, que correm impressas) em que elle descreve a vida de Luis de Camões, pela mesma ordem com que a havia escripto em prosa ao principio dos seus Commentarios. Neșta Obra, que contém 1414. versos, tirados todos de diversos lugares dos Poemas de Luis de Camões, mais do que em outra alguma, se conhece bem a grandeza de engenho de Manoel de Faria, e Sousa, e o grande estudo que havia feito nas Obras do nosso Poeta. Por naõ defraudarmos o Público de hum monumento tao relevante, que a naõ ser esta nossa diligencia, ficaria em perpétuo esquecimento; e em obsequio dos Estudiosos, o daremos no fim do IV. Tomo.

Cremos que os nossos Leitores, com o que atéqui temos dito, ficam sufficientemente informados: : e por naõ molestá-los mais, passamos a dar-lhes o Discurso que Faria escreveo

para preceder á tal nona Ecloga, que tambem nesta nossa Ediçaõ vai debaixo do mesmo número, pois as levamos pela mesma ordem com que o mesmo Faria as levava. He, pois, o referido Discurso como se segue:

LAS ocho Eglogas antecedentes son las que asta agora anduvieron impressas, desde la primera Edicion que se hizo destos Poemas varios de mi Poeta (*). Las siete que se siguen, por la misma orden que llevan, hallè yo en un Manuscripto, que casi todo és de Obras suyas; aunque notablemente viciadas de los Copiadores. Entre ellas ay algunas agenas, pero tan pocas, que (segun los titulos con que se hazen conocer) no exceden de las que nombrarè, porque sirve esto a lo que luego he de dezir. En la hoja 1. aparece la Carta septima de Diego Bernardes a Pedro de Lemos, Secretario de la Marqueza de Alcanizas. Del mismo, adelante,

(*) Este Discurso de Faria deve suppôr-se escripto depois da Ecloga oitava.

la Egloga que entre las suyas es la 14. En la hoja 45, un Soneto, que dize ser del Duque de Aveiro; y es el 133. de mi Poeta. En la hoja 48. unas Estancias, que son de la Egloga 11. de Bernardes en la 50. un Soneto de Luis de Castro al Rei Don Sebastian; y otro amoroso de Luis Franco: y el de Garcilasso, que empieça : O dulces prendas, etc. En la 54. otro de Luis Franco a un desafio que tuvo en Castilla D. Martin de Castelobranco. En la 55. otro, que dize ser de Simon de Veyga a D. Luis de Ataide; y siempre fue impresso por de Luis de Camões, y es el 64 entre los suyos: ya el se sigue otro del mismo D. Luis, en respuesta, que es el 196 de mi Poeta. Esto es lo que en este Manuscripto se halla con otros nombres, que no sea el de mi Poeta : y tambien sin el, se hallan otras cosas (pocas) que claramente se vè, que no son suyas, por ser disparates. Todo lo otro es suyo; aunque no todo tiene su nombre. Sin su nombre está la Egloga 3., y la Cancion 1., y muchos Sonetos que indubitablemente son suyos: con el está por suya la Ecloga 15. Mas

porque las 9. 10. 11. 12. 13. 14. estan sin nombre alguno, y las 9. 10. 11. 12. 13. andan impressas por de Diego Bernardes, (en su livro intitulado el Lima, que consta de 20. Eglogas, y de 33. Cartas y yo tengo por cierto que son de Luis de Camões, y las pongo aqui por suyas, soi obligado a dar la razon porque lo hago, para que no parezca, que sin ella quiero quitar a alguno su gloria; y mas quando con esto no se puede añadir alguna a Luis de Camões: porque la que el no mereciere por lo impresso (que fue lo que se halló mas correto) mal la podria merecer por lo halla tan estragado. Peró no es justo (sea lo que fuere) que de un tan grande hombre se pierda cosa alguna de las que se hallaren con luz de suyas; porque la suya fue tal, que aun por entre essas tinieblas se descubre.

que se

Digo, pues, que lo que me obliga a tener por de Luis de Camões essas cinco Eglogas que andan inpressas por de Diego Bernardes, és lo que se sigue distribuido por numeros de

razones.

Que para quien conoce de estylos, es cosa clara que son de Luis de Camões: y esta razon sola bastava, quando no uviesse más. Al grande Apelles, que nunca el otro Pintor avia visto, conociò el solamente por una linea, que avia echado en una tabla. Quien tendrá conocimiento de los pinceles Poeticos de Camões, y de Bernardes, que pueda creer, que es de los deste, lo que es de los de aquel? En Bernardes no ay erudicion; no ay affectos; no ay conceto considerable; no ay elevacion alguna; no ay constancia; porque si acaso tiene dos versos sufficientes, los ahoja con mil sin numero, y con mil desaires. Pues si en estas cinco Eglogas ay todo esto tan proprio de Luis de Camões, como dexaran ellas de buena gana de ser suyas, por ser de quien nunca pudo tanto? Bernardes usó de una llaneza, que aunque mal cultivada, se hizo lugar en el vulgo.

Que Bernardes viendo muerto a mi Poeta, y que sus Obras sueltas andavan perdidas, se quiso apropriar algunas dellas. como consta claramente de sus Libros intitulados: Flores

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